Italia

Isla de Capri

7 de agosto de 2010

La isla de Capri se encuentra en la bahía de Nápoles, al sur de la ciudad de Nápoles. Está cerca de la punta de la península amalfitana, en la región de Campania. Se ubica al sur de Italia. Siendo un popular destino por sí misma, pero también lo es para tomar pequeños descansos si está visitando Nápoles o la costa amalfitana. Hecha de piedras calizas, es muy pintoresca y ha sido durante mucho tiempo un lugar favorito entre los emperadores romanos, artistas, escritores y algunos ricos y famosos. Actualmente, Capri todavía es uno de los destinos más populares del Mediterráneo. Las atracciones en la isla incluyen la Marina Piccola (el pequeño puerto), el Belvedere de Tragara, los Faraglioni, que se proyectan sobre el agua, la ciudad de Anacapri, la Gruta Azul (Grotta Azzurra) y las ruinas de las Villas Romanas Imperiales.

Isla de Capri

Isla de Capri

Para llegar a la isla hay que tomar la ruta de ferry de Nápoles a Capri. La cual conecta Italia y el golfo de Nápoles y de momento es operada por 3 compañías de ferry. SNAV Aliscafi opera sus travesías hasta 8 veces por día, NLG 8 veces por día y el servicio de Caremar es disponible hasta 3 veces por día. Por lo que visitar esta isla desde la península es tremendamente sencillo y muy accesible para todo el mundo. Si quieres subir a Capri, utiliza el funicular que conecta la Marina Grande con la Piazzeta en el centro de Capri, que te transportará en menos de cinco minutos por dos euros. Muy recomendable sobre todo si vas con dos pequeñas y una de ellas en su sillita. Como para subir andando. Quizás cuando sean más mayores seguro que lo harán a pie. Por ahora, con el funicular vale.

Isla de Capri

Isla de Capri

Isla de Capri

Isla de Capri

El casco antiguo de Capri se ubica en la parte más alta de la isla y sus calles son todas peatonales. La Piazzetta es la zona de más actividad, con tiendas exclusivas, restaurantes y donde se encuentra la Iglesia de San Stefano. Seguimos por Via Tragara hasta un mirador. Pero estamos obligados a hacer un alto en el camino. Casi llegando a tu destino, está el kiosco de granizados de Doña Lolita. Una mujer que prepara uno de los mejores granizados de limón, naranja, café o fresa de toda la isla. Sentarse con uno de ellos admirando los tres Faraglioni desde arriba es un espectáculo que no tiene precio. Y a Ángela y a María les encanta. Por lo que no queda más remedio que sentarnos a disfrutar del momento. La verdad que ha sido todo un acierto venirnos en la mañana de hoy a visitar la isla de Capri.

Isla de Capri

Isla de Capri

Isla de Capri

La Via Krupp es un camino construido en 1902, proyectado en zigzag por Emilio Mayer. Lleva el nombre del industrial alemán Friedrich Aldred Krupp, un enamorado de Capri que vivía en una suite del Hotel Quisisana y que compró los terrenos para construir un camino que le permitiera llegar directamente a la Marina Piccola. La vía empieza junto a los Jardines de Augusto, un precioso lugar desde donde las vistas son magníficas. Esta vía no es una calle normal. Se trata de los 100 metros más escarpados y zigzagueantes que uno pueda imaginar, con una pendiente casi continua que deja sin aliento a los que menos en forma se encuentren. Pero merece la pena caminarla de una punta a otra, pues lo haremos sobre una auténtica obra de arte de la Ingeniería Civil, con un empedrado perfecto.

Ángela y María en la isla de Capri

Una vez dado un paseo por Capri, lo mejor es reservar en la misma Marina Grande una excursión alrededor de la isla. Casi todas las compañías realizan rutas por los acantilados y las grutas de Capri. El precio depende de si lo haces en compañía de más gente (unos 19 euros) o si quieres alquilar una pequeña embarcación para ti solo. La aventura suele durar una hora. La Grotta Azzurra (Gruta azul) es la más célebre de todas las atracciones que puedes visitar. Para conseguir entrar en ella, tendrás que cambiar de embarcación a un pequeño bote con remos, tumbarte y acceder a una de las maravillas de la naturaleza: aguas de un azul difícil de igualar, debido a la luz solar que se filtra en su interior. Algo que hoy al ir con Ángela (María se quedó con su madre en Marina Grande) no pudimos hacer. Otra vez será.

También pasarás por los conocidos I Faraglioni, inmensas rocas de curiosas formas que se encuentran al sur de la Isla de Capri. Está el Faraglione di Terra o Saetta que está unido a la isla. El Faraglione di Mezzo o Stella que es el que tiene una cavidad. Y el Faraglione di Fuora o Scopolo que es el que está más alejado de la línea de costa y es el único lugar del mundo donde habita el lagarto azul (coerulea Lacerta faraglionensis). En la antigüedad estas formaciones rocosas eran utilizadas como faros para guiar las embarcaciones para ello se encendían fogatas y de aquí, probablemente, su nombre: Faraglioni. El que tiene un arco, al pasar bajo él, si te das un beso con quien vayas, sellaréis vuestro amor para siempre, según cuenta una leyenda. Ángela y yo nos besamos. Así que nos tendremos amor eterno mutuamente.

De vuelta al barco

Volvemos a la Marina Grande, que es el puerto principal de la isla. Y a menos que optemos por la espectacular llegada en helicóptero, es el primer contacto con la isla. Base de los paseos en barco en Capri y de muchas otras cosas en la isla. Se encuentra situado en la parte norte de la isla, justo de frente al estrecho de Bocca Piccola, en el entrante natural que forma la misma bahía al que posteriormente se añadieron dos bancos artificiales, para aumentar aún más la protección contra los vientos con la que ya contaba esta cara de la isla. El interior del puerto se encuentra dividido en dos zonas. En el muelle de Levante encontramos una dársena, el litoral y un pequeño muelle con dos brazos, todo ello reservado al tráfico turístico, yates y pequeñas barcas. Allí están los servicios esenciales como restaurantes, bares y tiendas de alimentación.

Fuera del puerto deportivo de Levante, encontramos la parte de Poniente del Muelle. Es aquí donde llegan los trasbordadores de pasajeros, hidroalas y lanchas motoras que traen a los turistas desde los puertos de Nápoles, Sorrento, Positano, Amalfi, Salerno e Ischia, pero también al puerto sur de la isla llamado Marina Piccola. Alrededor del conjunto de Marina Grande se encuentran algunos de los hoteles más importantes de la isla. Vemos cómo llegan los ferrys desde puertos como Nápoles, adonde regresamos nosotros para subir a nuestro barco. Junto a la Marina Grande hay un bonito paseo. Damos una vuelta y nos sentamos en un banco para tomar las últimas fotografías de nuestra jornada en la isla de Capri. Una auténtica maravilla disfrutar de estos lugares con nuestras pequeñas. Espero que os haya gustado.

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *