Senda Pirenaica Etapa 3: Elizondo – Sorogain


Miércoles, 18 de julio de 2018
Después de la espectacular etapa de ayer, con un tiempo fabuloso, comenzamos otra jornada en los Pirineos navarros. Aparecen dos perfiles en esta etapa 3 de la Senda Pirenaica porque la alargo hasta Sorogain. Me he venido arriba y en lugar de 17, hoy hago poco más de 25 kilómetros. El sendero abandona la parte más atlántica de los Pirineos para adentrase en los montes de Quinto Real. Donde reinan los hayedos. Estoy en la carretera que cruza Elizondo, a la altura de la iglesia de Santiago. Localizo las marcas rojas y blancas del GR11. Salgo por pista asfaltada, para enseguida, junto a un panel informativo del GR11, tomar un camino a la derecha. El día amanece con fresco pero parece que no amenaza lluvia. Veremos cómo va evolucionando el cielo. Que nunca se sabe qué puede ocurrir con el tiempo estando en las montañas. Así que avanzo con alegría.


No será la última vez que vea la pista que mencioné anteriormente, enseguida me vuelvo a encontrar con ella junto a la borda de Zaldarriaga, en una zona llana. Poco después las marcas nos mandan por un camino a la derecha, el trazado se cambió para evitar la pista. La mañana está con niebla, por lo que auguro una jornada tranquila en cuanto a la lluvia. Esperando que salga el sol. Mientras tanto disfrutaré de las imágenes que dejan mañanas como estas. Un ejemplo de ello es la telaraña que me encontré en una alambrada del camino. Decorada con las gotas del rocío. Sigo caminando y de momento la senda no es dura. El desnivel no es muy elevado y el peso de la mochila todavía no es agobiante. Supongo que en etapas con desniveles más pronunciados la carga que llevo a la espalda se notará mucho más.

Dejo la niebla y aparece el sol en la etapa 3 de la Senda Pirenaica
Junto a la borda de Jaimesaltsu (360 m) vuelvo a encontrarme con la pista. La ignoro y sigo a la derecha por un camino. Más adelante se cruza la pista y poco después encontramos una fuente con pilón. Sigo, y de nuevo aparece otra fuente. Paso una zona en la que suele haber barro y encaro un tramo con fuerte pendiente antes de volver a encontrarme con la pista en una curva cerrada. Continúo por el hayedo en busca del collado de Urbillo (890 m). Aquí veo un refugio de cazadores (cerrado), con fuente, mesas y fogón. La niebla va desapareciendo poco a poco, la mañana se queda con unos colores realmente preciosos. No me he encontrado con nadie desde que salí de Elizondo. Pero en un pequeño repecho, a lo lejos junto a un árbol, diviso a las dos únicas personas con las que me cruzo hasta el momento.



Ahora tengo dos opciones: seguir el GR11 o subir a la Peña de Alba (sin señalizar) para juntarnos después en la muga 128. Cerca del crómlech de Hargibel (más corto, mayor desnivel). Si optas por la segunda, poco después del collado subirás por sendas buscando la mejor zona para pasar. Para bajar seguiremos el cordal que se desprende al sureste, caminando por la zona más alta acompañados de un paisaje espectacular. Si seguimos el GR, en el collado de Urbillo, se deja la pista y continuamos por senda bajo la cara norte del Pico de Alba. Después viene una zona de rasos atravesada por algunos arroyuelos. Sigo disfrutando de unas vistas espectaculares en esta etapa 3 de la Senda Pirenaica. Y cada kilómetro que avanzo me sorprende un poco más este maravilloso paisaje. Que saboreo aquí arriba, en solitario.
Camino entre España y Francia


Estoy ya en el collado de Hargibel (991 m), una valla marca la frontera. A mi izquierda tengo Francia y a mi derecha está España, voy en dirección este. Con la silueta de los Pirineos navarros enfrente. Sigo esa valla unos kilómetros, junto a ella debería ver el crómlech de Hargibel, pero no lo encuentro. Se sigue junto a la valla, se suceden las palomeras y se pasa por una zona de hayedos. Así se alcanza un collado al que llega una pista desde el Baztán. En el lugar hay una gran balsa (de las ranas), un regato y una cabaña. Alcanzo la Borda de Kinto (960 m). Se trata de una borda de cazadores que dispone de fuente y mesa. La senda sigue subiendo. Se atraviesa un hayedo y se sale a una zona despejada que puede resultar confusa los días de niebla. Mucho ojo con la señalización.

Atravieso la alambrada en un primer collado y continúo a media ladera bajo Iparraldeko Kaskoa. En este lugar confluyo con el GR12 y en adelante coincidirán hasta el collado de Zagua (1164 m). Atención a este lugar, el GR12 continúa por el cordal, yo en cambio, giraré bruscamente a la izquierda (norte). Inicio el descenso hacia el puerto de Urkiaga. Menuda bajadita tengo que superar hasta el puerto. Allí tienes dos opciones: continuar o parar. En un poste hay un anuncio de un hostal próximo que van a recogerte, el Hostal Arrobi Borda. Sus números de teléfono son 948 30 47 09 y 630 38 02 89. Llego reventado. Descanso un rato y como algo en el Puerto de Urkiaga. Luego tomo una pista que arranca en dirección este, aunque enseguida se abandona para tomar un atajo.



Etapa muy dura esta etapa 3 de la Senda Pirenaica
Se suceden los búnkers en la subida y así, se llega al collado de Adipe (1185 m), en una zona de pinar bajo la mole del Adi (1457 m). Se cruza la alambrada y se sigue horizontal ladeando el Adi por su vertiente norte. En el collado de Aratun, GR11 y GR12 se separan de nuevo. El GR12 continúa por el cordal, yo giraré al sur e iniciaré un fortísimo descenso por el barranco de Odia, cubierto por un espectacular hayedo. El sendero es impresionante y disfruto de unos momentos en soledad muy interesantes. El silencio reinante, solamente interrumpido por el piar de los pájaros y una ligera brisa, es mi único compañero de caminata. La pendiente se relaja y poco a poco se abren algunos claros. La senda va junto a un río y así se llega a una carreterilla, ya por terreno despejado.


Estoy en Sorogain (830 m). El albergue de Sorogain está abierto casi todo el año y cuenta con servicio de cafetería (650549161). No hay ningún alojamiento más en varios kilómetros a la redonda. Al poco rato de llegar se produce una tormenta espectacular de viento, agua y granizo. Menos mal que no me pilló. Duermo yo solo en el albergue, no hay nadie más hospedado. El alojamiento, con sábanas y media pensión, me sale por 31€. La wifi no va mal. Puedo subir algunas de las fotos de las jornadas anteriores. Os dejo el resumen de esta jornada en la pequeña peli que hice. Esta etapa 3 de la Senda Pirenaica ha sido dura, larga pero espectacular. Los paisajes son preciosos, cada día que pasa más. Pero noto que en algunos momentos no estoy al cien por cien. Paciencia, todo llegará.

2 Comments
Andrea Reyes Izquierdo
Estás imagines son maravillosas ,y los caballos divinos
Carlos Marín
Así es, muy bonita fue esa etapa.